Desde el Centro de Industriales Panaderos de Merlo (CIPAN) adelantaron que, debido a las constantes subas de costos, el precio del kilo de pan en la provincia de Buenos Aires aumentará un 30% a partir de la próxima semana. Este incremento llevará el precio del kilo de pan a valores entre $2.200 y $2.400, comenzando el próximo lunes 27 de mayo.

En un contexto de inflación creciente, donde los precios de los alimentos aumentaron un 1,1% durante la primera quincena de mayo según datos privados, esta nueva suba del pan agrava la situación económica de muchas familias. 

El presidente del CIPAN, Martín Pinto, explicó que la decisión responde a los incesantes incrementos en los costos de producción, incluyendo tarifas de servicios públicos, materias primas, alquileres y sueldos.

"Nos vemos en la obligación de sacar una nueva lista de precios a nivel provincial, que establece que el precio sugerido del kilo de pan será de $2.200 y $2.400 en las zonas céntricas", señaló Pinto. 

La medida fue tomada tras una reunión con representantes de numerosos centros de panaderos del Gran Buenos Aires y el equipo económico del CIPAN, donde se discutieron los nuevos costos enfrentados por el sector.

Pinto lamentó la necesidad de este ajuste, pero destacó que es una medida necesaria para evitar el cierre de panaderías y la pérdida de puestos de trabajo. "Tenemos que tomar esta drástica resolución para parar un poco con los cierres de panaderías, intentar que no se sigan fundiendo los colegas y que no nos quedemos sin fuente de trabajo", afirmó.

Entre los centros de panaderos que adoptaron la medida, además del de Merlo, se encuentran los de Marcos Paz, Las Heras, Moreno, General Rodríguez, San Miguel, José C. Paz, Malvinas Argentinas, Quilmes, Florencio Varela, San Pedro, Lobos y Navarro, entre otros.

Por su parte, Gastón Mora, presidente del Centro de Panaderos de Avellaneda, habló sobre las razones detrás de estos aumentos. "Brasil viene a comprar trigo a la Argentina debido a las inundaciones y tenemos una resolución de hace diez días en la que el Gobierno nacional deroga el cupo de exportación”.

“Estas son las consecuencias del libre mercado por el cual todo aquel que quiera exportar trigo lo puede hacer, lo que no tenemos es a un gobierno enfocado en abastecer el mercado interno y solucionar esta situación", detalló Mora en un programa de televisión.

Además, Mora destacó los aumentos constantes en los costos operativos. "En marzo pagamos $51 mil de luz, en abril $151 mil y en mayo $258 mil. Pasamos de una bolsa de harina de $8.200 a $12.880 ayer", concluyó, subrayando el impacto directo de estos incrementos en el precio final del pan.

En medio de estas subas, los panaderos buscan sobrevivir en un mercado cada vez más complicado, intentando mantener sus negocios a flote y asegurar el suministro de un alimento básico en la dieta de los argentinos.