La confirmación de Cristina Kirchner como candidata a diputada provincial por la Tercera Sección Electoral tomó por sorpresa a La Libertad Avanza, que no contaba con esa posibilidad en su tablero. El distrito más populoso de la provincia de Buenos Aires, con casi 5 millones de votantes, ahora pasa a tener un peso estratégico inesperado para los libertarios, que apostaban a perder allí, pero compensar con triunfos en otras secciones.

Hasta ahora, la coordinación electoral estaba en manos de Sebastián Pareja y Cristian Ritondo, armadores de LLA y el PRO respectivamente. Pero con el desembarco de Cristina, el control total de la estrategia en ese distrito quedará bajo el “Triángulo de Hierro” que integran Javier Milei, Karina Milei y Santiago Caputo. Las decisiones pasarán por Casa Rosada, relegando el peso de Pareja y Ritondo.

En el oficialismo todavía no hay un nombre definido para enfrentar a la expresidenta, pero se barajan opciones dentro del riñón libertario, como el propio Pareja, Nahuel Sotelo (secretario de Culto) o algún referente joven promovido por Las Fuerzas del Cielo, el espacio de Caputo. También se menciona a Diego Santilli, pese a que su candidatura en la Tercera no sería la ideal para sus planes.

La candidatura de Cristina podría empujar una mayor unidad del peronismo, y achicar las chances de una derrota contundente en septiembre, lo que a su vez podría condicionar el clima político y económico de cara a las elecciones nacionales de octubre, donde se juegan 35 bancas clave para el Congreso. Por eso, la elección bonaerense pasó a ser clave para el oficialismo.