La empresa Cervecería y Maltería Quilmes informó que detendrá temporalmente la producción en su planta central debido a una fuerte caída en las ventas. La medida se tomó tras registrar una baja superior al 40% en el consumo de cerveza en los últimos seis meses, afectado por la recesión económica y el encarecimiento del producto.

Como parte del plan de contingencia, la empresa adelantará vacaciones a parte de su personal y aplicará una reducción proporcional de haberes, según confirmaron fuentes sindicales. La compañía aclaró que la decisión no implica despidos, aunque generó preocupación entre los trabajadores por la incertidumbre sobre la continuidad del empleo en el corto plazo.

Este freno en la actividad de una de las industrias más emblemáticas del país se suma a otras decisiones similares adoptadas por empresas alimenticias, textiles y automotrices. Especialistas en consumo aseguran que el contexto inflacionario, junto con la caída del poder adquisitivo, está provocando un ajuste en las preferencias de los hogares que impacta de lleno en productos como las bebidas alcohólicas.