El juez federal Alejo Ramos Padilla declaró inconstitucional e inconvencional el decreto con el que el presidente Javier Milei intentó designar a Ariel Lijo y Manuel García Mansilla como jueces de la Corte Suprema, luego de que el Senado rechazara sus pliegos y García Mansilla renunciara al cargo.

En su resolución, Ramos Padilla remarcó que el Ejecutivo no puede usar el mecanismo previsto en el artículo 99, inciso 19 de la Constitución para nombrar jueces de la Corte, ya que el procedimiento correcto es el del inciso 4 del mismo artículo, que exige el acuerdo del Senado.

Mientras tanto, el Gobierno oficializó la renuncia de García Mansilla mediante el decreto 276/2025. El jurista había asumido hacía apenas 39 días y presentó su dimisión tras la negativa del Senado a aprobar su designación. De este modo, la Corte vuelve a quedar integrada por tres jueces: Horacio Rosatti, Ricardo Lorenzetti y Carlos Rosenkrantz.

Lijo, por su parte, no renunció a su cargo como juez federal, pero su pedido de licencia extraordinaria fue rechazado por el máximo tribunal.